El Consejo de Gobierno de Castilla y León aprobará mañana casi con toda probabilidad la fusión entre Caja España y Caja Duero, según informaron a la agencia Ical fuentes de la Administración autonómica. Se culmina, de este modo, un proceso que se ha prolongado durante un año y medio y que ha sido ampliamente respaldado por los órganos de gobierno de ambas entidades.

Una vez aprobada la fusión entre las dos entidades, primera que se produce en España en el actual proceso de concentración, se conformará la octava entidad de ahorro española por número de activos y la duodécima por patrimonio neto, según el último ejercicio cerrado, con 46.643,4 millones de euros en activos y un patrimonio neto valorado en 2.409,3 millones.

A partir de la aprobación, deberá constituirse el Consejo de Administración de la nueva entidad, compuesto por los 34 miembros de los actuales consejos de Caja España y Caja Duero y proceder a la elección del presidente y de los vicepresidentes. Según los acuerdos alcanzados el pasado mes de enero en Tordesillas, la propuesta del presidente de la entidad le correspondería a Caja España, si bien el decreto ley aprobado el jueves pasado por el Gobierno autonómico veta la posibilidad de que sea el actual titular de la entidad, Santos Llamas, ya que impide que un empresario con créditos en una caja pueda presidirla. Este consejo permanecerá al mando de la entidad por un periodo máximo de dos años, periodo en el que deberá manterializarse la fusión e incluso decidir el nombre comercial de la entidad.

Por otro lado, los servicios jurídicos de las seis cajas de ahorros de Castilla y León han solicitado a la Junta de Castilla y León una reunión, para aclarar las incompatibilidades del nuevo Decreto Ley, y antes de que previsiblemente mañana el Consejo de Gobierno apruebe la fusión de Caja España y Caja Duero. Fuentes de Caja España dijeron ayer a Efe que en esta entidad no están seguros del contenido que marca el nuevo Decreto Ley, en lo que concierne a las incompatibilidades en los nuevos nombramientos.

A falta de analizar exhaustivamente el decreto, parece que afecta al presidente de Caja España, Santos Llamas, en lo que respecta a la posible presidencia de la entidad resultante, pero no se sabe si también dificultaría los nuevos nombramientos necesarios para culminar la fusión con Caja Duero.