La minería de las comarcas leonesas de El Bierzo y Laciana se encuentra desde ayer lunes completamente paralizada. A la decisión de los mineros de no acudir a los tajos se ha sumado una convocatoria de huelga oficial durante 15 días para dejar patente el malestar por el impago de las dos últimas nóminas, (la que tendrían que cobrar en agosto y la de septiembre), así como protestar por la decisión del Gobierno central de aplazar hasta el 15 de septiembre la convocatoria de la Comisión de Seguimiento del Plan del Carbón. Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha asegurado a los mineros en huelga que el Ejecutivo central está buscando el «mix energético» y les ha mostrado su apoyo «firme y decidido». Asimismo, aseveró que el Gobierno no les va a dejar «abandonados a su suerte».

Con estos dos precedentes, los mineros de Unión Minera del Norte (UMINSA), los de Hijos de Valdomero García y los de Alto Bierzo decidieron ayer salir a manifestarse y protagonizaron cortes de tráfico en la autovía del Noroeste, la A-6, en Bembibre, a la altura del kilómetro 371, y también en la misma autovía en Carracedelo, en el kilómetro 399. Lo mismo sucedió en la autopista A-66, a la altura de La Magdalena, la que comunica León con Asturias. A esta medida de presión se unió el encierro de 14 mineros del Grupo Viloria en el pozo Casares, en la localidad de Tremor de Arriba.