Los alumnos de Bachillerato de Castilla y León tienen un buen nivel, llegan a ser brillantes en muchos casos, pero cuando realizan la actual prueba de acceso a la universidad obtienen menores notas que los alumnos de tras comunidades, donde la exigencia de la prueba es sensiblemente menor en determinadas materias. Esto tiene varias consecuencias: los alumnos castellano-leoneses no pueden acceder a la carrera que quieren cursar en su propia comunidad, o tienen que salir a universidades de otras comunidades o ingresar en universidades privadas. Luego, es muy difícil que regresen.

Esto es lo que contó ayer José Antonio Felipe Pastor a varias decenas de padres (la presencia de alumnos benaventanos fue nula debido a los exámenes, y la de profesores fue exigua) en La Encomienda, a tres días de que Valladolid acoja una manifestación para protestar por la desigualdad de la EBAU entre comunidades autónomas. El presidente de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Zamora, se ha sentado como agente en la mesa del pacto educativo y conoce de primera mano los efectos de la desigualdad de la EBAU también como padre. Por eso ayer llamó a la movilización.

"Esto hay que modificarlo para que no seamos la comunidad que tenemos la EBAU más difícil y después los chavales obtengan una nota menor y no puedan acceder a la carrera que quieren o tengan que irse a otras comunidades o entrar en universidades privada", explicó antes de subrayar la paradoja de ser la comunidad con alumnos más brillantes que luego tienen que marcharse por las plazas universitarias las ocupan alumnos de otras comunidades autónomas dónde el nivel de exigencia fue menor, lo que les permitió obtener mejores notas.

Felipe, que aconsejó a los alumnos que estudien los 97 estándares de historia y no se fíen de un supuesto temario preferente "por los antecedentes", se mostró pesimista con la posibilidad de que la solución esté en el pacto educativo. "El próximo año hay elecciones y tengo la impresión de que la educación se va a utilizar de nuevo como arma arrojadiza", explicó. Por todos estos motivo animó a padres y alumnos a acudir a la manifestación el viernes en Valladolid para apoyar a los estudiantes, que son los que han decidido salir a la calle para luchar contra esta desigualdad.