Practicar equilibrio encima de unas ruedas o unos zancos, disfrutar bailando el hula hoop, saltar sobre el muelle del pogo o hacer bailar mazas o pelotas son solo algunas de las alternativas que el taller de circo, realizado ayer en la Plaza de la Madera ofreció ayer a los más jóvenes, en una fría mañana en la que la participación fue llegando a cuentagotas.
La iniciativa se llevó a cabo gracias a integrantes de la escuela del Circo de la compañía Zirkozaurre, que por la noche tenían previsto subir al escenario del Reina Sofía un espectáculo de circo.
"Hemos traído cosas que solemos usar nosotros en Bilbao en la escuela de circo con los niños y para que vayan metiéndose en el mundo del circo y vayan teniendo la curiosidad. Tienen que tener ganas, curiosidad y querer hacer cosas del circo", explicó Joseba Urribari, uno de los organizadores de esta iniciativa y uno de los intérpretes del espectáculo de la noche en el Reina Sofía.
Hasta las tablas del teatro benaventano subió el espectáculo "Morse", que según explicó "es una mezcla de mucho de danza, de risa y comedia y algo de circo".
"Morse" es el resultado del proyecto "Haztegia 2015", un programa de residencias artísticas. Este proyecto en concreto, Morse, es la modalidad amateurs, en la que se seleccionan a tres personas a nivel nacional que ya tengan alguna formación o vinculación con el mundo del circo y Zirkozaurre les forma y les ayuda a crear el espectáculo.
