El alcalde de Benavente Luciano Huerga abogó ayer en una mesa redonda organizada por la Federación Regional de Municipios y Provincias (FRMP) por una reforma fiscal en la concesión de subvenciones en el marco de los programas estatales de la vivienda que están permitiendo la rehabilitación de los barrios de manera privada, colectiva y los espacios públicos.

Huerga remarcó las ventajas del ARRU no solo en la regeneración de barrios degradados, sino en la estimulación de la actividad económica que suponen las obras de rehabilitación, pero criticó que las ayudas tengan que ser declaradas en el IRPF, lo que está echando para atrás a beneficiarios de rentas muy bajas que por este motivo, por el pago de impuestos, se ven impelidos a rechazar la subvención.

El alcalde insistió en elogiar, en la mesa redonda sobre el Plan Estatal de la Vivienda, las ventajas económicas que este tipo de obras de rehabilitación suponen para municipios como el benaventano y le puso cifras: desde el año 2012, momento en que comenzó a materializarse el entonces denominado ARI (luego ARU y ahora mismo ARRU) se han invertido en Benavente 3 millones de euros de los que se han beneficiado cuatro barrios y 250 viviendas.