La plaza de San Salvador o de la iglesia de Matilla de Arzón ha renovado su cara tras la urbanización realizada por el Ayuntamiento con la nueva pavimentación. Los trabajos finalizados en estos días pasados han contado con un presupuesto de 26.000 euros financiado con el Plan Municipal de Obras de la Diputación del pasado ejercicio.

Una ejecución de obra consistente en la retirada del obsoleto pavimento de hormigón, practicado en los años sesenta del pasado siglo y cuyos paños se encontraban en avanzado estado de deterioro, para dar paso a una nueva pavimentación a base de adoquinado del tipo románico. Una fisonomía tan en boga recientemente por algunas de las plazas céntricas de la comarca que ahora se ven reformadas.

Los trabajos de pavimentación han permitido la previa instalación de sumideros de pluviales, así como el encintado con bordillos a cota cero en el conjunto perimetral del ágora.

La urbanización de la plaza cuenta además con dotación del mobiliario existente, como varios bancos que se ubican ahora en zonas preservadas de las inclemencias meteorológicas.

El Ayuntamiento tiene previsto instalar un jardín japonés provisto de rocallas entre las que se insertan las especies vegetales y florales a ubicar en la pequeña elevación del terreno que da acceso a la platea de entrada al templo parroquial. La zona cuenta ya con instalación de riego automático.

Otra de las actuaciones que vendrán a completar la urbanización del ágora consiste en la renovación o sustitución de la fuente de hormigón que fuera construida a principios de los años sesenta del siglo pasado.

Una actuación a ejecutar en base "a las apetencias vecinales", confirmó la alcaldesa Consuelo Morán apuntando a la retirada con motivo de las obras realizadas de pavimentación de una fontana ornamental que se hallaba ya en estado deteriorado.