Decenas de niños y mayores se animaron ayer a participar en un divertido encierro en el que siete astados hicieron un animado recorrido urbano con los peques por protagonistas. Es el encierro de toros hinchables que ha organizado, una edición más, la Asociación Benaventana del Toro Enmaromado (ABTE) que colabora con esta actividad en el programa oficial de las fiestas del toro.

El calor, que ha sido tema de conversación toda la semana, no quiso pasar esta jornada sin estar presente y obligó a la organización de la actividad a retrasar su comienzo más de una hora para animar una mayor participación. La zona del toril viejo fue acogiendo a niños y mayores que buscaron la sombra para esperar la salida de los toros hinchables que se hizo de rogar hasta las siete y cuarto.

Después el recorrido se hizo rápido por las calles céntricas. Los más pequeños se animaron a ponerse delante de los animados astados que embistieron a los participantes ocasionando más de una carcajada.

Siguiendo las indicaciones del speaker, Juan Carlos Herrero, los toros fueron parando para descansar y hubo tiempo para animar la actividad con música y temas conocidos. Siguió el recorrido por la zona de Sancti Spiritus hasta llegar a la Plaza de la Madera donde se improvisó un coso taurino en el que los niños, por grupos de edades, mostraron su habilidad ante los astados y hubieron, de nuevo, muchas risas.