La Diputación ha tenido que suministrar el agua potable a los vecinos de Villaferrueña debido al resultado de las últimas analíticas que dejaban en evidencia la optima potabilización del agua de consumo a la población. La institución provincial, a solicitud de la alcaldía, trasladaba el pasado martes hasta la localidad un camión con 504 garrafas de 10 litros de agua de Calabor con el fin suministrar el agua potable a los vecinos. Una situación prevista ya por la Diputación gracias al servicio del que dispone en estos casos para suministrar agua a las poblaciones necesitadas, tanto en garrafas como en cisternas.

Los análisis del agua de consumo arrojaban un resultado desfavorable, atribuyéndolo al líquido almacenado en el aljibe municipal, explicó ayer el alcalde Gregorio Martínez quien "por precaución" decidió recurrir a la Diputación.

Desde la alcaldía se comunicaba la situación a los vecinos a través de un Bando a la par de informar sobre el reparto de dos garrafas de agua de 10 litros por cada vecino. Una situación que se va a repetir en la próxima semana. A la par se comunicaba a los vecinos de los pasos a seguir con inmediatez, como el vaciado, la limpieza y desinfección del aljibe. Situación que se realizaba ayer mismo y se procedía nuevamente al llenado del depósito. Las nuevas muestras del agua para su análisis y una contra analítica determinarán retomar el suministro del agua de la red municipal a los vecinos.Los problemas de salubridad en el depósito del abastecimiento de agua potable se han resuelto con el reparto de las garrafas de agua, ya que el agua de la red no se veía afectada para el aseo o para cocinar.

Villaferrueña dispone ya de una renovación integral de la red del abastecimiento aunque con un depósito ya obsoleto. Y este próximo lunes comienzan las obras de construcción del nuevo aljibe con capacidad para 90.000 litros. Unas obras adjudicadas por 85.839 euros de los que la Diputación abona el 60% y el 40% restante el Ayuntamiento.