La segunda jornada técnica sobre emergencias sociales y catástrofes que acoge Benavente ha sido intensa en cuestión de contenidos y ha permitido llegar a unas primeras conclusiones que en la jornada de hoy se explicarán para la puesta en marcha de una Plan Municipal de Emergencias. El grupo de trabajo interno reunido ayer al final de la jornada señaló la importancia de calibrar el alcance de cada situación. "Cuando un riesgo o una emergencia va más allá de lo habitual, que es algo que tendrá que definir el protocolo, se puede activar el Plan de Emergencias y para ello habrá que establecer un responsable", explicó el concejal de Bienestar Social, Antonio Vega. Pero el plan va más allá, y han determinado que es necesario también establecer "responsables operativos, es decir que en función del tipo de problemática que haya el responsable es uno u otro, puesto que no es lo mismo que ocurra un incendio a otra situación de riesgo", añadió el concejal.
En las ponencias celebradas ayer estuvo Javier Fernández Ruiz, jefe de la Unidad de Refuerzo a Distritos y de Departamento de Gestión de Información del Mando Único en el Centro Integrado de Seguridad y Emergencias de Madrid (2013-2016) señaló "hay una serie de principios que son extrapolables a cualquier ciudad".
En este sentido se refirió a la necesidad de la concienciación "el plan tiene que prever un escenario de riesgos y cómo los atajaríamos". Hay que tener en cuenta los recursos propios y establecer los riesgos a los que se enfrenan y saber cómo se van a coordinar. "No hace falta hacer un gran comité pero sí hay que coordinar".
El ponente hizo especial hincapié en la necesidad de formación puesto que "hay cosas muy cambiantes y hay que entrenarse en riesgos muy específicos. Y cuando uno no llega hay que activar el nivel superior". La formación es una de los aspectos que ya se plantea el Ayuntamiento.
Establecer comunicación rápida y el fomento de reuniones, tales como estas jornadas, es fundamental para la puesta en marcha de iniciativas.
