Conocer y ejecutar los diferentes y variados peinados tradicionales, indispensables a la hora de lucir adecuadamente la indumentaria tradicional es el objetivo del taller de peinados tradicionales que la Casa de Cultura La Encomienda de Benavente acogió ayer de la mano de la Asociación Son de los Valles. "El desconocimiento y a veces la complejidad a la hora de elaborar el peinado tradicional, han sido los factores que han determinado la posición relegada que se le ha otorgado hasta bien entrado el siglo XX, pero que sin embargo ha pervivido escasamente en otros lugares, en ocasiones cuidándose con esmero y elegancia, siendo muchas veces signo de distinción", señala la asociación.

La tarde de ayer organizó una muestra y taller de peinados tradicionales, a cargo de Nuria Salazar, conocedora del mundo de la cultura tradicional. "La base principal es dejarse el pelo largo y no teñirlo con colores llamativos o mechas, que ahora están muy de modo, pero que antiguamente era negro, blanco o rubio", explicó Salazar. "Si te pones una indumentaria tradicional y te olvidas del pelo, no consigues los pequeños detalles. Por muy vestida que vayas, con un rodado precioso y una camisa impresionante, si no cuidas los pequeños detalles no luce nada", añadió.

Para las personas que tienen el pelo corto también hay solución. Para ello están los postizos. "Muchas veces se pone de excusa el pelo corto, y no tiene por qué ser así. El trabajo de hacerlo es un poco más dificultoso".

En el taller de ayer los participantes pudieron conocer cómo hacerse una trenza, y otros peinados más elaborados, para los que se suele necesitar la ayuda de una segunda persona. "Es más difícil hacerlo uno mismo", puntualizó.

Nuria Salazar hizo hincapié en que "los peinados son modas que vienen de todas partes, este mismo peinado se puede encontrar en muchos lugares. Hay peinados característicos en el sentido de que se tienen que adaptar a ciertos adornos. Para meter el cabello en una montera, o cómo se coloque el pañuelo o la mantilla.

Con el tiempo han cambiado los peinados y también las herramientas que se utilizan para realizarlos. "Antiguamente para fijar el pelo se utilizaba agua con azúcar y no se lavaban el pelo. La apariencia que hay que dar es que te ha lamido una vaca y ahora utilizamos los productos que encontramos en la droguería. Hay que ensuciar el pelo para que vaya donde tú quieras".