"Un día de alegría y de fraternidad", así definían responsables de la agrupación europea de cooperación territorial transfronteriza Duero Douro, a la jornada de convivencia llevada a cabo ayer en Camarzana de Tera en el marco del programa de intercambios "Conociéndonos".

Un total de 300 alumnos de centros educativos de Almaraz de Duero, Riofrío de Aliste, Lubián, Montamarta, Mogadouro, Vitigudino y Camarzana de Tera participaron durante la jornada de ayer en un abanico de actividades organizado por Duero Douro y el Ayuntamiento de Camarzana.

La agrupación europea de cooperación territorial intenta fomentar con este programa, un año más el interés por la cultura del otro lado de la frontera. Así se han venido desarrollando encuentros de este tenor durante los últimos años.

La bienvenida a los escolares y profesores se llevó a cabo en el edificio de usos múltiples de Camarzana con aires musicales tradicionales y los parabienes de representantes de Duero Douro, de la coordinación del programa, directoras de los centros anfitriones, tanto del IES "los Valles" como del Ceip "el Tera", y del Ayuntamiento anfitrión, el alcalde Francisco Martínez San Román y la concejala de Cultura y alma mater de este programa acometido en la localidad, María Jesús Castaño. No faltó la presencia institucional del arqueólogo de la Dirección General de Patrimonio, Jorge Santiago y del técnico del gabinete arqueológico "Strato", Gregorio J. Marcos. Precisamente el referente de la villa romana de Orpheus servía como eje fundamental del contenido programático.

Tras las presentaciones de los alumnos de los centros participantes se realizó un repaso por la historia del municipio a través de un vídeo pasando, en un cambio de escenario, desde el Auditorio al pabellón deportivo para rla representación de la obra de teatro "Dioscoride el Musivario y el Gran Mosaico de la villa romana" a cargo del grupo "Jano" Recreaciones Históricas". Las actividades, talleres y juegos se sucedieron para trasladarse a la ribera del río Tera, en el área de ocio y recreativa "la Barca", con motivo de participar en una comida de convivencia.

Si la actuación musical de bienvenida corría a cargo del grupo de folclore de la escuela de "los Valles", de los sones de despedida se encargaban los alumnos procedentes de Portugal.