La Mancomunidad de la ETAP de Benavente y los Valles prevé una adhesión masiva de municipios en el año 2018 y una notable bajada del precio del suministro del agua en alta debido a la situación actual de los ríos y de los acuíferos y a un previsible endurecimiento normativo por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero.

Así lo aseguró ayer el vicepresidente de la agrupación de municipios y alcalde de Benavente, Luciano Huerga. La dirección de la Mancomunidad, que estos días ha recibido confirmación de la Junta de Castilla y León de que la secretaria de Pobladura y de la Torre del Valle podrá compaginar su puesto con el de secretaria de la Mancomunidad, prevé establecer con carácter anual los consumos de todos los municipios para prever el precio del metro cúbico del agua de cada ejercicio.

El primer trimestre de 2017 ha sido "histórico", esto es, el de mayor consumo de los municipios que reciben el suministro desde la estación potabilizadora de Sitrama de Tera, especialmente desde la incorporación de Castrogonzalo y la adhesión de otros municipios que antes no estaban conectados como Burganes de Valverde.

La consecuencia inmediata del aumento del consumo ha sido la reducción de la tarifa en alta de 30 céntimos de euro a casi 28 céntimos de euro.

El conocimiento de la previsión del agua que va a consumir cada municipio enganchado con carácter anua será revisada con carácter trimestral para corregir posibles desviaciones, aunque la intención de ajustar esta información no es otra que la de negociar con la sociedad estatal Acuaes el precio de la tarifa.

En teoría, y siempre según las estimaciones de la nueva directiva, el hecho de que los ayuntamientos no enganchados tengan que cumplir requisitos cada vez más exigentes para garantizar la calidad del abastecimiento a sus poblaciones forzará en 2018 un previsible aumento de las solicitudes de enganche y la consiguiente bajada del precio del agua por aumento del consumo.