Las mascotas de Santa Cristina de la Polvorosa o las de Ayoó de Vidriales, al igual que en alguna otra localidad más de la comarca, cobraron protagonismo en la jornada de ayer porque era su fiesta, la de su patrón San Antonio Abad.

En estas localidades se sigue rindiendo veneración al santo protector de los animales como se hace en muchos otros pueblos con actos religiosos, pero en estos dos, en el de la Polvorosa como en el vidrialés, del Este al Oeste de la comarca, se mantiene la tradición con la bendición de los animales.

Eso si, en ambos pueblos el agua bendita del hisopo llegaba en exclusiva a los perros, a una tortuga y un loro, porque a felinos y a otros animales sus dueños no quisieron pasearlos hasta la iglesia, a recibir las aguas de San Antón.

En todo caso, la tradición manda y aunque con menos boato que hace años en las parroquias de Santa Cristina o la del Salvador en Ayoó las mascotas llegan hasta las puertas de la iglesia con la simpática algarabía característica. "Dino", un can alegre y más que nervioso, observa a sus congéneres de Ayoó y con satisfacción inclina ladeando la cabeza sin perder de vista a su dueño.

El diácono Fernando García sale ya al pórtico de la iglesia revestido con una capa pluvial y todos los perros le rodean para recibir las aguas de san Antón, las tomadas seguramente de la cercana fuente del caño.

Media hora antes, en Santa Cristina de la Polvorosa, el párroco enfila la procesión con la imagen de San Antonio arropado por los devotos de la antigua cofradía que data de 1890 y cuya vara ostenta la familia Sobejano.

Antes de iniciarse el desfile procesional, el párroco Baltasar Villalón asperge con el hisopo el agua bendita de un relumbrante acetre. Las generosas gotas llegan a "Rita", la lorita amazónica de 10 años que "es un sol, la alegría de la casa", dice el propietario de esta mascota, o a "Linda", una podenca de 8 meses, o a la pequeña tortuga "Pepa" de la niña Cayetana. Y, cómo no, a "Triki", a "Yako", a "Ray", "Simba", "Tedy", "Jana" o a "Lolo".

La algarabía estaba asegurada pero eso sí, en la procesión y en la iglesia las mascotas se portaron, porque ayer era el día de su santo, el día de San Antón.