La campaña en defensa del mantenimiento de la fábrica de Kronospan en Villabrázaro ha reunido más de 3.000 firmas en una semana. De esta cantidad, 2.000 se han recogido en la carpa instalada el último jueves del año, y durante la mañana de ayer, en las proximidades del mercadillo de la ropa benaventano, en la calle Las Eras. El resto se han recogido en establecimiento comerciales, y hosteleros, y en los ayuntamientos de la comarca.

Esta cifra podría aumentar hasta el martes, momento en que el alcalde de Villabrázaro viajará a Burgos para reunirse con directivos de la multinacional austriaca en España. Dorsey García Aparicio les aportará copia de los respaldos que se hayan conseguido hasta ese momento, aunque la campaña seguirá vigente.

El regidor recordó ayer que el objetivo sigue siendo el mantenimiento de la prensa de producción de tableros, el "alma mater" de la fábrica, que Kronospan quiere desmantelar a partir del día 15 para instalarla en una nueva fábrica en Bulgaria. En este proceso invertirá entre uno y tres meses y para ello Kronospan empleará hasta un centenar de trabajadores centroeuropeos. La intención de la multinacional pasa por iniciar el desmantelamiento de la prensa sin interrupción hasta que se complete. La multinacional ha pedido presupuestos y reservado habitaciones en varios hoteles de la zona. Dorsey García llevará las rúbricas a Burgos y pedirá de nuevo a los directivos de la multinacional que mantengan la fábrica intacta para su reapertura. Con el resultado de este encuentro, retornará a Villabrázaro donde está previsto que el Grupo de Trabajo decida qué pasos reivindicativos dará a partir de ese momento.

Ayer, tanto el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, como el vicepresidente primero de la Diputación, Juan Dúo, volvieron a reiterar la importancia de la unanimidad política y social de la comarca para defender el mantenimiento de la factoría y frenar la deslocalización que entraña el desmantelamiento de la prensa de producción de tableros. Del mismo modo, el secretario general provincial de UGT, Ángel María del Carmen, volvió a subrayar la necesidad de que la comarca cierre filas en torno al mantenimiento de una fábrica cuya pérdida definitiva tendría consecuencias muy negativas en el futuro inmediato de Benavente y Los Valles.