El Centro Cívico y Social, una obra mastodóntica que comenzó a ejecutarse con el comienzo del siglo y pasó por todo tipo de vicisitudes técnicas, de obra e incluso políticas, hasta que fue terminada no podría abrirse íntegramente hoy por hoy. Tan solo la planta baja del edificio está en regla, el resto requiere pequeñas reformas, el ajuste de los servicios fundamentales, y la aportación de documentación a diferentes empresas y administraciones, además de los obligatorios permisos.

El anterior equipo de Gobierno evaluó las necesidades que presentaba el inmueble y llegó a anunciar su intención de ponerlo en marcha para que las asociaciones de la ciudad, fin para el que fue construido, lo ocuparan.

El actual equipo de Gobierno ha presupuestado 50.000 euros para poner a punto el inmueble, resolver la mayor parte de las carencias detectadas y, sobre todo, legalizar el uso de las instalaciones a la mayor brevedad posibles.

Según ha podido saber este periódico se necesitará primero llevar a cabo una docena de actuaciones relacionadas con la energía eléctrica, el gas, y el suministro térmico, además de otros trámites antes de utilizarlo.

En relación al suministro de baja tensión faltan planos a escala de las plantas e incluso planos de la ubicación del albergue dentro del edificio, una de las dependencias que el Ayuntamiento quiere poner en valor. Es necesario un anexo del proyecto y trámites adicionales para utilizar el sótano como garaje, y será necesario elaborar los esquemas de los cuadros eléctricos de los ascensores.

Las planta inactivas carecen también del certificado de pruebas de puesta en marcha para el uso de gas natural; sólo hay documentación legal de una caldera y será necesario aportar los consumos de combustión.

En cuanto a la térmica del inmueble, no existe contrato de mantenimiento rubricado, faltan los certificados de fabricación de las calderas; certificados de homologación de algunos elementos y de los depósitos solares entre otros; y son precisos ajustes relacionados con este tipo de energía.

Además, restan por realizarse pequeños trámites administrativos relacionados con algunos permisos y reparaciones en aseos y diferentes partes del inmueble. La intención del equipo de Gobierno pasa por resolver estas carencias el año venidero.