Los restos del benaventano José Antonio Otero Madrigal, ex diputado de Unión de Centro Democrático (UCD) por Zamora en las Cortes Constituyentes, reposan ya en el camposanto de Benavente, donde ayer se celebró su entierro. Al último adiós no han faltado familiares y amigos que celebraron el acto religioso en la iglesia parroquial de la Virgen del Carmen, en la más absoluta intimidad.

Otero Madrigal, que falleció en Madrid a los 89 años de edad, estuvo en la primera línea del partido de centro. Con él contó siempre Adolfo Suárez, desde las Constituyentes de 1977 hasta su dimisión. Fue uno de los hombres fundamentales en la formación de la UCD de Zamora, entonces con trabajo de traductor en Suiza, donde colaboraba con instituciones como la ONU. Importante fue su labor en la apertura permanente de los puestos fronterizos en Zamora. Su conocimiento del mundo europeo en esa complicada etapa le llevó a ser presidente de la delegación oficial de las Cortes españolas en la Asamblea de Estrasburgo tras completarse las formalidades para confirmar a España como el vigésimo miembro del Consejo de Europa.

Medalla al mérito de la Cámara Oficial de Comercio de Zamora y Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, sus restos ya descansan en el cementerio de Benavente.