Han comenzado las IX Jornadas de Naturaleza y Montaña, organizadas por el Club Montañero Benaventano, con una gran aceptación de público como viene ocurriendo edición tras edición. La jornada de ayer contó con la participación del guía profesional de alta montaña Álvaro Ramos, que abordó a través de una proyección el trabajo que realizan los guías en los Picos de Europa haciendo un repaso de los orígenes, la situación actual, y el futuro de los guías de montaña en la Cordillera Cantábrica.

Para Ramos es importante tener un notable grado de creatividad en las actividades que realiza como guía. "En cada época y en cada momento se ha hecho alpinismo o escalada de una determinada manera. Se van aplicando nuevos valores y nuevas tecnologías que nos permiten evolucionar y aderezarlo con la rapidez y organización de varias actividades. Es muy importante esa creatividad", explicó.

En la proyección mostró actividades técnicamente "difíciles" que encargan algunos clientes. "No realizamos solo actividades sencillas como nos atribuyen, hacemos actividades de un nivel técnico muy alto", añadió.

Según explicó Ramos, la labor de los guías normalmente es con gente con un nivel técnico medio en la montaña pero que no tiene tiempo de plantificar sus propias actividades o que no se atreven a asumir los riesgos que implica ir liderando la cordada, la esquiada o la escalada. Hizo referencia al problema "muy grave" de intrusismo profesional que, "ocasiona la propia administración ya que es difícil acceder a las zonas para solventar esto. La gente se cree que todo el mundo puede hacer lo que quiera en alta montaña y no es así".

Señaló también que a la imprudencia se suma mucho desconocimiento de los riesgos que existen en la montaña.