No comenzó con mucha animación pero finalmente el "Pedaleo Solidario" logró ayer el respaldo de decenas de personas que se sumaron a la iniciativa promovida desde el Ayuntamiento de Benavente. Es una de las actividades programadas dentro de la Semana de la Movilidad que dio comienzo el pasado fin de semana con actos puntuales como una marcha cicloturista y una carrera popular pero que esta semana se ha puesto en marcha con carácter oficial. La de ayer, además de ser una iniciativa enmarcada dentro de las realizadas para promover el uso de la bicicleta, ha sido una actividad solidaria. Caja Rural se ha vuelto a comprometer con la transformación de los kilómetros rodados en las bicicletas estáticas, que se expusieron ayer en pleno centro urbano, por unidades de material escolar.

Han colaborado con este pedaleo también los gimnasios de la ciudad, con la cesión de una bicicleta estática para el desarrollo de la actividad; así como la Policía Local, que también ha cedido la suya. Operarios municipales se encargaron por la mañana de ubicar una carpa y las bicicletas.

La actividad dio comienzo a las cinco de la tarde y aunque en algo menos de media hora ya contaba con doce inscrito, la verdad es que no se veía mucha animación en torno a la iniciativa. Sí se animaron algunos jóvenes que paseaban por la ciudad y dos policías locales que no dudaron en subirse a hacer kilómetros por una causa solidaria.

Voluntarios de Cruz Roja han sido los encargados de la organización de la actividad, así como las inscripciones, el control de los kilómetros realizados y también de captar gente para que se sumara a esta causa que tardó un poco en lograr que las cuatro bicicletas estáticas de las que se disponía se completaran con gente. Con los kilómetros recorridos, se dará traslado a Caja Rural para que realice la donación de material escolar. Los beneficiarios serán las familias necesitadas con las que cuenta Cruz Roja.

En esta ocasión no quisieron faltar los representantes municipales. Dejaron su presencia para el final de la tarde y se subieron a recorrer unos kilómetros para ayudar a la causa. La participación de los niños fue meramente testimonial, aunque sí hubo alguno que quiso subirse a poner su granito de arena.