Las llamas del incendio ocurrido el 20 de julio en terrenos del valle de Vidriales arrasaron no sólo encinares y jarales, cultivos de trigales y pastos, sino que además obligaron a desplazar a la fauna, tanto de caza mayor como menor y de especies protegidas.

El club deportivo de cazadores Valle de Vidriales que gestiona la actividad cinegética en una superficie superior a las 6.000 hectáreas de los términos de Granucillo, Grijalba, Moratones, Pozuelo, Bercianos y Villaobispo interviene a través del personal de la junta directiva y de la guardería del coto en la recuperación de los vivares afectados por el fuego.

Durante el incendio que se prolongó varios días y afectó a casi 200 hectáreas de Cunquilla, Granucillo, Sitrama y Brime de Urz, el personal de la directiva y la guardería del coto ya prestó su colaboración en las labores de extinción, en unas tareas encomendadas por los Servicios de Extinción de Incendios de la Junta de Castilla y León y de la Guardia Civil. Trabajos consistentes en la colaboración en el corte de caminos, limpiezas y demás.

A raíz de la declaración de la extinción del incendio y pasadas 48 horas, varios representantes del coto Valle de Vidriales y de la guardería realizaron un estudio del impacto ocasionado sobre las especies con el consiguiente desplazamiento de la fauna, tanto de caza mayor como menor, así como de las especies protegidas y para ello se llevó a cabo un dossier para actuar en días sucesivos con aportaciones tanto de comida (alfalfa, paja, beza, etc.) y de agua, en bebederos artificiales, afectando a parajes especialmente con alta densidad de conejos, confirmaron desde la junta directiva de este club deportivo de cazadores "Valle de Vidriales".

Las actuaciones han afectado además a la recuperación de los vivares protegiéndolos con ramajes, tocones, con tierra y aportando la alimentación necesaria.

Esta sociedad cinegética agradecía ayer la colaboración prestada para la recuperación del hábitat en la superficie afectada por el incendio que tuvo en vilo a los vecinos de algunas localidades y obligó al desplazamiento de la fauna.