Serán años de trabajo pero desde ayer el Archivo Municipal de Benavente ha dado "un salto cualitativo" hacia la modernización y la mejora de la custodia de sus fondos. La adquisición de un escáner abre un proceso de digitalización de 6.000 legajos, más de un kilómetro de documentos, al que tendrán acceso los ciudadanos que lo deseen.

"Las áreas de Cultura, Patrimonio e Informática están trabajando conjuntamente para dignificar el Archivo Municipal y convertirlo en un archivo del siglo XXI. El motivo de la adquisición del escáner no es otro, que poder digitalizar y conservar, el legado histórico, cultural y patrimonial de nuestra ciudad, documentarlo y permitir de este modo, que esté al alcance de todos los ciudadanos y que pueda ser utilizado por aquellos profesionales, estudiantes, investigadores, curiosos y amantes de la historia local", explicó la edil de Urbanismo, Sandra Veleda.

El proceso de digitalización no vendrá solo. Simultáneamente se iniciará "a la mayor brevedad posible" el traslado al Archivo Municipal de todos los fondos. Buena parte de ellos se encuentran almacenados en distintas dependencias municipales "y en la actualidad no se encuentran en las mejores condiciones de conservación".

La digitalización se iniciará por los documentos de mayor valor cultural y patrimonial y poco a poco y conforme a las posibilidades del archivo se irá digitalizando el resto de documentación administrativa. Para ello está previsto reforzar el servicio, en principio con alumnos en prácticas, pero sin descartar un aumento de la plantilla. "Pretendemos ir dando, poco a poco, los pasos para convertir el Archivo Municipal en un archivo dinámico, vivo y en un lugar de consulta y que la documentación que aquí se encuentra y es propiedad de todos y todas los benaventanos sea accesible", añadió Veleda.

Entre los legajos y documentos que se van a digitalizar destacan los privilegios reales y entre ellos la carta puebla; documentos de Xll, Xlll y X lV; actas municipales del siglo XV y prácticamente, la serie completa de actas municipales desde el siglo XVI. En el proceso digitalización que comenzará por el libro de sepulturas del cementerio municipal que data del año 1933, se incluirá toda la documentacíón administrativa, que hasta cinco años se encuentra repartida por los distintos departamentos municipales.