El Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León ha abierto un procedimiento sancionador contra el Ayuntamiento de Benavente por la comisión de una presunta infracción administrativa en materia de gestión de residuos en los puntos limpios.

El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil inspección los días 17 y 20 de enero las inmediaciones, el exterior y el interior de los puntos limpios y detectó la existencia de dos contenedores sin etiquetar que contenían baterías y acumuladores y destinados a pilas alcalinas con derrames en el suelo y mezclados con otros residuos.

Según la denuncia del SEPRONA, estos residuos se encontraban a la intemperie. La patrulla detectó también mezclas de residuos de distintas categorías como envases de aceite industrial, plásticos, hierros, envases de pintura-disolvente, además de vertidos de los aceites usados sobre el suelo.

Apenas un mes después de esta denuncia, el Partido Popular elevó otra al SEPRONA por la proliferación de vertidos incontrolados presuntamente dañinos para el medio ambiente a las puertas y en el entorno del punto limpio de Los Salados. La denuncia estaba acompañada de un dossier fotográfico que detallaba los distintos tipos de restos depositados en la zona. Según la oposición en el Ayuntamiento benaventano, se trataba de diverso material susceptible de causar daños al medio ambiente, como neumáticos, cristales y otros elementos procedentes de vehículos, restos de material informático, televisores, cascotes de obra, envases de aceites y otros restos.

Todos estos vertidos aparecían diseminados extramuros del punto limpio, junto a los accesos de las instalaciones y entre la vegetación que rodea el punto de recogida y el canal de la ría.

Sobre esta denuncia, que al igual que la formulada por la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil podría suponerle al Ayuntamiento la imposición de una multa, no se habría incoado aún expediente.