La casita de chocolate del relato de Hanser y Gretel ya es bastante atractiva para cualquier niño, por su delicioso sabor, pero si además en su interior esconde historias muy muy dulces, el lugar se vuelve irresistible.
Es por eso que el colegio Fernando II ha convertido la biblioteca del centro educativo en una casita de chocolate con multitud de relatos en su interior, en formato cuentacuentos. Se trata de una de las actividades que ayer se llevaba a cabo en las instalaciones de este colegio de Benavente y que se incluyen en las V Jornadas de Animación a la Lectura de Zamora, en el que participan varios centros educativos de la provincia.
En esta caso, las actividades van más allá del aula y se invita a padres y madres a participar del programa los miércoles por la tarde. Su colaboración es clave, en el desarrollo de las historias, bien con sus respuestas, sus aplausos o la repetición de frases o palabras.
Las coordinadoras del plan y profesoras de Educación Infantil, Verónica de Paz y Fabiola Maestro, se convierten en la Bruja Travesura y la Bruja Ciruela, respectivamente. Ellas son las cuentacuentos encargadas de potenciar "la imaginación y la creatividad, de potenciar el gusto por la lectura y de rescatar la literatura clásica", explican momentos antes de su actuación ante adultos y menores.
Consideran que los niños de ahora apenas conocen los relatos de toda la vida y, con el fin de homenajear esta literatura clásica, relatan las historias de Hansel y Gretel, Blancanieves, Caperucita Roja, Alicia en el País de las Maravillas y otras de carácter más actual o inventadas por ellas mismas. Entre las técnicas, además de la expresión oral y gestual, están también métodos como el franelograma (un tablero donde pegar letras o número con fieltro), las marionetas de dedo o la técnica Kamishibai, basado en láminas que tienen dibujos por un lado y texto por la otra cara.
El Plan de fomento de la lectura se imparte tanto en Infantil como en Primaria y se usa como hilo conductor de otras celebraciones como fue el Día de la Paz Escolar o los Carnavales. Además de interactuar con otros centros educativos con obras de teatro y dramatizaciones de textos, las clases han elaborado libros viajeros. Uno de ellos podrá verse en una exposición en el Etnográfico de Zamora en abril.
