La Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Benavente ha comunicado al CEAS la situación de una familia de presunto origen rumano que ocupa de forma intermitente una vivienda deshabitada de propiedad municipal junto a la Ciudad Deportiva y la de una mujer que desde hace dos semanas reside en el antiguo muelle de carga de la estación de ferrocarril. En ambos casos la Concejalía ha pedido a la Policía Local controles constantes y ha programado medidas de apoyo concretas para cubrir las necesidades de estas personas hasta que el CEAS se haga cargo de la situación.

La primera de las comunicaciones al CEAS se produjo el lunes después de que el concejal de área, Antonio Vega, mantuviese varias conversaciones con una mujer que desde hace varias semanas ocupa la vieja nave de carga y descarga de mercancías de la estación de ferrocarril.

Vega explicó ayer a este periódico que el Ayuntamiento ha remitido un escrito a la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Zamora informando de la situación concreta de esta persona, que podría requerir algún tipo de evaluación de salud psicológica. La comunicación tiene en cuenta también el hecho de que dado el mal estado del techo del inmueble y dado que la mujer "aunque de forma muy ordenada, reside y cocina en el interior", existe riesgo de que pudiera producirse un accidente.

Vega ha pedido a la Policía Local que realice controles diarios y hable con esta persona, a la que se suministrará se suministrará una comida caliente al día procedente de un establecimiento hostelero local y se le permitirá el acceso a los accesos de la estación en el horario de apertura pública, de ocho de la mañana a ocho de la tarde. Está situación, según ha informado Vega, se mantendrá hasta que intervenga el CEAS o la Fiscalía decrete alguna disposición concreta. Dado que esta zona se ubica en la periferia, la Policía ha recibido orden de realizar varias visitas a esta mujer en aras de su seguridad.

El segundo caso afectaría a una matrimonio de origen rumano de edad avanzada y a un hijo de unos 30 años que de forma intermitente han ocupado la vivienda contigua a la zona que el anterior equipo de Gobierno preveía utilizar como huertos para jubilados. Fuentes municipales explicaron que esta familia había sido desalojada del inmueble por la Policía durante el anterior mandato por orden municipal.

Vega confesó ayer que había conocido el caso por la comunicación pública realizada por la oposición. El concejal visitó la vivienda acompañado de varios agentes pero no halló a la familia. La Policía ha recibido orden de que vigile la zona para identificar a la familia. Aunque el caso será puesto también en conocimiento de los servicios sociales del CEAS "al no tener competencias el Ayuntamiento", mientras se resuelve cualquier acción "la Concejalía ha decidido velar por que cubran las necesidades básicas y de seguridad de estas personas en caso de que aparezcan".

Antonio Vega criticó abiertamente la denuncia pública realizada por la oposición, que calificó de "imprudente, irresponsable, indiscreta e innecesaria". "Me ha producido tristeza conocer a través de los medios de comunicación esta petición del PP sin dirigirse ni a mí ni al Ayuntamiento". Vega lamentó "la falta de respeto que han tenido con estas personas, poniendo en riesgo su seguridad".