En Marta Fernández Farrés saltan a la vista sus habilidades. La altura recuerda que llegó muy arriba en el baloncesto profesional y su facilidad de palabra se acompaña de un título en Periodismo, cursos y posgrados complementarios.

-¿En qué consiste el proyecto que está llevando a cabo con la Federación Española de Baloncesto?

-Explico mi experiencia personal sobre todo lo que me he conseguido con el baloncesto y con el deporte. Ahora tengo la suerte de ser una embajadora con el proyecto "Universo Mujer" con la Federación Española de Baloncesto, donde lo que queremos es dar a conocer y potenciar el papel de la mujer en nuestra sociedad y qué mejor manera de hacerlo que a través de un nuevo modelo para todos, donde la mujer sea protagonista. Los tres ejes de los encuentros que realizo, como el de esta semana en Benavente, es la mujer, la igualdad y el deporte.

-¿A qué público va dirigida esta campaña?

-A todas las edades, nos adaptamos tanto a niños como a adultos. Con los pequeños lo más interesante es intentar inculcar esos valores que nos ha dado el deporte y con los mayores, además de darles a conocer el proyecto, que puedan resolver sus inquietudes.

-¿Cómo se puede potenciar la igualdad en el día a día?

-Trabajando desde pequeñitos. Sobre todo la educación y la formación es básico en la igualdad de género para hacerles saber que no hay diferencias, darle total normalidad a los niños y niñas que quieran jugar a cualquier deporte y creo que desde ahí es la base donde se construye todo. Después, poco a poco intentar vincular la mujer en todos los ámbitos, en todos los sectores y que no haya diferencias.

-¿Cuál es su experiencia personal en temas de igualdad?

-Yo he vivido lo que es triunfar en el deporte masculino y femenino en casa y además he tenido la suerte de vivir esa igualdad desde pequeños. A pesar de que esto fue hace muchos años, siempre fuimos tratados por igual.

-¿Ha sido difícil como mujer llegar tan arriba como Vd. ha llegado?

-No, no ha sido difícil, ha sido a base de mucho trabajo y mucho esfuerzo al igual que, supongo, el de un hombre. Es verdad que no hemos tenido tantos recursos, pero no me puedo quejar de mi trayectoria; si cuando empecé a jugar, cuando era niña, me dicen que voy a conseguir todo lo que he conseguido gracias al deporte ni me lo hubiera imaginado. Además tengo el ejemplo en casa: mi madre estaba convocada con la Selección y no pudo ir porque no había condiciones para eso, tenía que trabajar y estudiar y yo he tenido la suerte de poder dedicarme a lo que me gusta. Hay un camino todavía por recorrer, pero he sido una privilegiada.

-¿Qué hay de la constante comparación con su hermano, Rudy Fernández?

-En casa no ha habido esa diferencia por suerte. Se vivió con normalidad que yo, al ser la mayor, consiguiera los objetivos primero y después ha sido él. Fuera sí que se ha notado más. Rudy siempre dice que él es "el hermano de Marta", al ser yo la mayor, pero bueno, cuando él ha conseguido todo lo que ha conseguido también es normal que se nos conozca al revés por la repercusión que tiene él. Yo fui Marta Fernández hasta los veinte años, a partir de ahí empecé a ser "la hermana de", un título que llevo con mucho orgullo, pero me gusta más cuando me reconocen como Marta Fernández.