Desde hace tres semanas una cinta policial colocada entre las farola de la mediana de la Cañada de la Vizana impide la instalación de puestos. Los titulares que tenían asignado espacio de venta en el centro de la avenida han sido desplazados a los puestos laterales vacantes. La Concejalía de Ferias ha adoptado esta medida siguiendo el consejo de la Policía Local "por razones de seguridad". En las últimas semanas se ha intensificado la vigilancia policial para evitar la instalación de vendedores morosos.