Los restos vegetales resultantes de la poda de árboles en Benavente serán triturados. Así lo confirmó ayer el concejal de Medio Ambiente, Manuel Burón, apuntando a que el Ayuntamiento posee una máquina para tal fin "inutilizada durante siete u ocho años", en alusión a las legislaturas previas de los populares.

Comenzada la época de poda, los operarios trabajan esta semana en la zona centro, concretamente en los árboles que hay en los paseos de La Mota. Similar trabajo se ha hecho en la avenida Maragatos y se continuará haciendo en los diversos barrios, según informó la Concejalía del área, que este año combina a los trabajadores municipales con participantes del taller de empleo como personal "de apoyo".

Para los restos de poda, estaba previsto poner en marcha la antigua depuradora, situada en la zona de Cenvicos, como lugar para la quema de este tipo de restos.

Afirma Burón que están dados "los permisos" para el uso de esta instalación con dicho fin, pero tras el incidente del verano en Medina del Campo la Concejalía de Medio Ambiente ha cambiado de idea y no quemarán nada en esa zona "por la proximidad con la autovía", según Burón.

Los restos que no se trituren en Benavente se llevarán a una planta de reciclaje a Medina del Campo.

Sí se mantiene desde el Ayuntamiento el objetivo de dejar limpio el campo de Cenvicos, una zona que presenta restos de materiales tanto vegetales como de otro tipo.