Mantener en funcionamiento la maquinaria municipal que hace posible la prestación de todos los servicios locales básicos tiene un coste mensual superior a los 550.000 euros y podría rozar incluso los 100 millones de pesetas. Esto es lo que les cuesta a los contribuyentes mantener abierta y activa la Administración Local benaventana mes a mes para que gestione el resto de servicios.

La parte del león del gasto se la lleva desde hace años la nómina municipal que, aunque varía mensualmente en razón de algunas variables y de los trabajadores contratados con subvenciones externas de la Diputación Provincial y la Junta de Castilla y León, genera un gasto medio a las arcas municipales de 480.000 euros cada mes entre retribuciones fijas, costes sociales, productividades y horas extras.

A los costes laborales hay que sumar los costes de suministro y mantenimiento que hacen posible también la prestación de todos los servicios públicos municipales.

Iluminar la ciudad, mantener la calefacción de los edificios públicos, además de los servicios básicos de abastecimiento y saneamiento de estos inmuebles, y otros suministros imprescindibles para que la maquinaría municipal esté engrasada y los servicios por los que se cobran tasas y precios públicos funcionen, suponen un coste adicional de otros 100.000 euros mensuales aproximadamente.

Mantener a raya el gasto corriente ha sido una de las constantes la Intervención Municipal en los presupuestos de la última década y según los resultados de las liquidaciones presupuestarias, en parte se ha conseguido.

En 2010 por ejemplo y con el presupuesto liquidado, el gasto de personal fue de 6,83 millones de euros. La crisis y los recortes externos (por ley) e internos, redujeron esta cantidad a 6,28 millones en 2011, a 5,8 millones en 2012 y en 2013, y a 5,75 millones el pasado año.

Otro tanto ocurrió con los gastos corrientes, que pasaron de cinco millones de euros en 2010 a a 4,5 millones de euros el pasado año.