El albergue de peregrinos gestionado por el Ayuntamiento de Benavente se ha reabierto este lunes, 17 de agosto, tras comprobar que en él no hay rastro de las chinches.

Las tareas de control se han intensificado para asegurar que no queda rastro de estos insectos, comunes en el Camino de Santiago y que fueron detectados el pasado mes de julio por usuarios del albergue municipal, según informó la concejala del área, Nuria Herrero.

Este animal se esconde fácilmente, complicando su detección a simple vista. Por eso, durante los días 14, 15 y 16 de agosto se han cerrado las instalaciones municipales, situadas en la antigua estación de tren, para llevar a cabo la revisión y control correspondiente.

El monitoreo se repetirá próximamente, según informó la edil del área, para asegurar que la plaga no vuelve a producirse.