Un informe del Departamento de Urbanismo fechado a principios de año determinó que el edificio número 2 de la calle de Los Lagares presentaba numerosos daños "que no permiten garantizar las condiciones de seguridad, salubridad, habitabilidad y ornato público". El informe, que motivó la incoación de un expediente de declaración de ruina que acaba de ser archivado, concluyó que "la edificación ha sufrido movimientos significativos que se plasman especialmente en las grietas y deformaciones sin que se pueda verificar que los mismos se encuentran detenidos".

En concreto, el documento detalla que el interior del inmueble está apuntalado con una viga en su zona norte que está rodeada de grietas tapadas. Determina también "un abombamiento del muro en el paño situado entre la puerta de la vivienda y la primera ventana que ha desembocado en una amplia grieta horizontal y el desprendimiento del revestimiento interior del muro".

Aunque este es el daño más significativo en el elemento de fachada, el informe señala que se aprecian también otros desprendimientos que han sido reparados en distinta partes del mismo sin que se haya podido precisar de qué momento data dicha intervención. "Cabe señalar el deficiente estado de conservación de los elementos de madera, que resultan observables, incorporados a este muro", agrega al respecto.

El informe destaca también que techo del local presenta una acusada deformación, y que n la planta primera se observan diversas grietas y desconchones en suelos y techos que han sido reparadas. Enumera también la presencia de gotera, humedades y un avanzado deterioro de la madera por la humedad y por la acción de xilófagos en algunos de los elementos.

45.000 euros

Igualmente, "el revestimiento de fachada se encuentra en mal estado de conservación, habiéndose producido sucesivos desprendimientos que dejan a la vista el cuerpo del muro seguidos de sucesivas reparaciones puntuales". El informe indica que los servicios municipales tuvieron que eliminar partes del revestimiento que suponían un riesgo inminente de caída a la vía pública.

Del mismo modo, "el revestimiento exterior de la pared medianera, ejecutado con un chapeado de ladrillo hueco se encuentra desprendido de la hoja principal y presenta una grieta que recorre la mayor parte de su altura. Dicha grieta fue en su día recatada con mortero, si bien la grieta ha vuelto a aparecer a través del mismo sin que se tenga constancia de cuándo se han producido los movimientos que la han producido". El Ayuntamiento colocó testigos a principios de año.

El Grupo Municipal Popular explicó ayer que sospecha que el apuntalamiento interior del edificio puede haber supuesto la consolidación del inmueble pese a estar fuera de ordenación y ha reclamado al equipo de Gobierno todos los informes obrantes y una nueva inspección técnica.

El alcalde, Luciano Huerga, explicó que la posición del equipo de Gobierno es la misma que mantenía en la oposición para que se produzca la alineación de la calle. El equipo de Gobierno prevé realizar una oferta o permutar el inmueble. En 2010 la arquitecta municipal valoró el edificio en 45.000 euros, en un solar de idéntica superficie con la posibilidad de edificar tres alturas o una parcela industrial de 700 metros cuadrados.