Corredores y asociaciones taurinas de Benavente hacen balance de las fiestas. Describen a "Quite", el enmaromado de este año 2015, como un astado "noble y bravo" que a pesar de ver acortado su recorrido desde la segunda argolla hasta el matadero, "se portó bien". Y a raíz de esta modificación en el recorrido por las condiciones físicas del animal, surge el debate de si éste debe ser modificado para futuras ocasiones. Los expertos consultados, corredores natos en la fiesta el toro enmaromado de Benavente, opinan unánimemente que el recorrido debe mantenerse y que sólo se cambiará si, sobre la marcha, se aprecia que al animal no puede completarlo en su totalidad, como se ha hecho hasta ahora.

En opinión de algunos, la primera argolla, situada en la plaza de la Madera, supone un freno importante para el toro. Hay quien apuesta por suprimirla y otros, como Cándido Carrera, por trasladarla a la plaza Juan Carlos I, donde el siguiente paso consiste en enfilar la calle Los Carros, una vía que suele hacerse a buen ritmo.

En el caso de incidentes como el del torito del alba del miércoles por la mañana, piden que haya otra vaquilla preparada, para que los más pequeños no se queden sin disfrutarla, verla y correrla.

Lesiones aparte, los propios corredores indican que si el animal no logra completar el trayecto asignado es, en gran medida, por la actitud de la gente, que lo cita cuando no debe o no le deja descansar como se debe tanto en argollas como en cualquier punto en el que se pare el enmaromado.

Es por eso que proponen crear un reglamento específico para estas carreras del toro enmaromado, con las que se puedan fijar normas al respecto y sanciones ante su incumplimiento, mejorando así la celebración de la fiesta y siendo conscientes de que, si afecta al bolsillo de los ciudadanos, éstos se toman más en serio las reglas, según cuenta Francisco Salagre, uno de los veteranos corredores de Benavente, que pide "que los políticos estudien la particularidad de nuestras fiestas".

Alberto Lorenzo, corredor benaventano, considera que las normas que pueden verse anunciadas en del recorrido del enmaromado, que pueden verse anunciadas en las calles por las que pasa el toro desde días antes al día grande de las fiestas, "se han quedado obsoletas y hay que actualizarlas, como se ha hecho en Pamplona o recientemente en Tordesillas". Con ese reglamento se evitaría actuaciones "que desgastan al animal y entorpecen a los corredores".

Alberto Romero, de Fuentesaúco, es uno de los pastores que pide "que se nos respete más, porque sólo nos hacen caso algunos".

Las infracciones son cometidas tanto por los propios benaventanos como por los visitantes, según coinciden los corredores encuestados, que se quejan de aquellos que realizan el recorrido "como si fueran unos encierros" o que sólo se ponen por detrás "para hacerse la foto. El toro hay que correrlo por delante, tirando de la maroma", reivindican.

Las asociaciones taurinas también tienen algo que decir al respecto: Jorge Villar, portavoz de la asociación Gente del Toro, explica que "ahora hay unas normas básicas, pero la gente hace caso omiso a todas ellas como es correr con mochilas, con vasos, con calzado no adecuado, bajo los efectos del alcohol, etcétera. Con las sanciones se conseguiría que la gente respetase más la carrera y no pusiera en peligro con su actitud al resto de corredores".

El presidente de la Asociación Benaventana del Toro Enmaromado (ABTE) pide "crear una comisión taurina" que se encargue específicamente de elaborar ese reglamento, que debe sentar en la mesa a Ayuntamiento, corredores y asociaciones taurinas. Al nuevo equipo de Gobierno local le piden "que nos tengan más en cuenta, aportando algún representante en la Comisión de Fiestas".

Todas estas tareas quedan pendientes para ese nuevo equipo de Gobierno y para la nueva Concejalía de Fiestas, ya que Bárbara Palmero, edil del área, concluye su mandato en esta primera quincena de junio tras cuatro años frente a la organización.