Una treintena de personas sin titulación sanitaria ha aprendido a actuar en situaciones de emergencia gracias a la formación recibida en el Ayuntamiento de Benavente.

Se trata de personal municipal y miembros de Protección Civil, que durante una sesión de ocho horas recibieron la teoría de la mano de profesionales del sector sanitario y practicaron con muñecos las indicaciones realizadas para llevar a cabo una reanimación cardiopulmonar, un atragantamiento, colocar a una persona en la posición lateral de seguridad y, por si fuera necesario, el uso del desfibrilador externo semiautomático (DESA).

Ayer una docena de personas de las áreas de deportes, cultura, juventud y medio ambiente, así como dos nuevos integrantes de Protección Civil fueron la última tanda en completar esta formación impartida en las dependencias municipales de la Plaza Mayor.

En la actualidad hay cuatro desfibriladores en instalaciones municipales, que son el teatro, las piscinas, el pabellon de La Rosaleda y un coche de Protección Civil.

Proximamente está previsto colocar un desfibrilador más en el campo de fútbol Alonso Pimentel, tal y como ha anunciado el propio Ayuntamiento en un comunicado, para así reforzar el material que se puede utilizar en caso de emergencias, especialmente para la parada cardiorrespiratoria y la consecuente salvación de vidas si se usa correctamente.