La talla de la Virgen del Carmen regresará a la iglesia de Arrabalde coincidiendo con la fiesta de la patrona. Para el día 4 de diciembre está previsto que ya se encuentre en su sede, en el templo parroquial. La talla que se rompió en la procesión del segundo domingo de mayo pasado, el día en que en esta localidad, desde hace años, se celebra la festividad en lugar de hacerlo cuando lo señala el calendario litúrgico, el 4 de diciembre.

En un camerino lateral se asentará nuevamente la recién restaurada escultura de la Virgen del Carmen de cuyas andas se desplomó el 11 de mayo durante la procesión en la que iba acompañada de otras cuatro imágenes.

Los daños que sufrió la talla, aunque graves, "no eran irreparables" al decir del técnico José Luis Casanova, cuyo equipo de restauración se ha venido haciendo cargo de la recomposición de la escultura desde entonces. La pesada talla de madera, de poco más de 1 metro y un peso de 40 kilogramos, se desplomaba al suelo dejando graves fisuras en el rostro de la imagen, en las falanges de la mano derecha, en el brazo del Niño Jesús, así como en varias partes de la pieza de madera que afectaron también al conjunto de la policromía. La factura de la escultura a base de tres cuerpos encolados también se vio afectada en su conjunto. Una importante obra artística hecha sobre madera de nogal negro entre los años 1680 y 1710. "De principios del barroco, pero barroco puro en el que se aprecian trazos manieristas", según el técnico restaurador del equipo astorgano.

Casanova tiene previsto hacer entrega a la parroquia la talla a la que "le faltan unos últimos retoques" que afectan a la policromía, aseguró ayer no sin antes explicar el proceso seguido por su equipo de restauración.

En el taller y tras un minucioso estudio de la escultura se iniciaba el proceso de restauración determinando los daños a la vez que se aplicaba un tratamiento de desinfección ante xilófagos. Unas tareas de cuarentena a las que siempre recurre este avezado equipo de expertos en restauración de obras de arte, de tallas, conjuntos escultóricos y retablos para prevenir que la madera sea afectada por la carcoma. A través de un estudio "científico" se proceden a evaluar los daños con exactitud para realizar la intervención que proceda en cada caso concreto, como apunta el técnico restaurador. En un siguiente paso de intervención se ha procedido a la retirada de los materiales cromáticos y del falso oro con que está bañada la pintura, ya que en una actuación anterior se habían aplicado pinturas de titanlux. En una fase posterior se comenzaron las tareas de recomposición de la madera en todas sus partes afectadas.

El desplome al suelo desde las andas dejó algunas tiras de madera que tuvieron que ser también recompuestas como si de "un rompecabezas" se tratase, asegura el técnico restaurador.