Los vecinos de Brime de Urz cierran hoy la programación de los festejos de la Sacramental con una verbena a cargo de la orquesta «Atabal» en un ambiente presidido por la armonía y el numeroso público que ha venido participando en las veladas musicales nocturnas y en el resto de actos programados por la Comisión del Ayuntamiento. Un encierro ecológico para los pequeños abre la programación matinal de la jornada tras la tradicional subida al cerro de San Esteban, para ver amanecer desde el mirador de la ermita.

En la tarde de este domingo una exhibición de baile de sevillanas a cargo de la escuela benaventana de Mary Jose da paso a la verbena y el concurso de bingo.

Brime de Urz ha venido recibiendo en estos días festivos a un nutrido grupo de vecinos residentes fuera de la localidad al que se han sumado paisanos de localidades próximas que han querido compartir encuentros en estas jornadas.

La fiesta de La Sacramental se celebraba ayer sábado con una misa y procesión por las calles de la localidad. Tanto el párroco, Miguel Hernández, como el sacerdote vecino del pueblo, Gabriel Benavides, oficiaron con solemnidad la celebración eucarística entonada con ensayadas voces por el coro parroquial. La charanga «Amistad» se encargó de llenar las calles de sonidos musicales durante la comitiva procesional con la Custodia. La tarde estuvo dedicada a los pequeños y en la noche se organizó una doble actuación musical, primeramente con el grupo «Divertimento» y después con el grupo musical «Audion».

En la primera jornada festiva, en la del viernes, los vecinos de Brime de Urz llenaron la plaza de la iglesia para degustar una merienda ofrecida por el coto de caza «La encina vieja» de Brime de Urz.

Ya entrada la noche se celebraba un desfile de carrozas y disfraces amenizado con una charanga musical.