El Grupo Municipal Leonesistas exigió ayer al alcalde de Benavente, Saturnino Mañanes, que asuma su responsabilidad en la «mala gestión económica» del cuatrienio 2007-2011, después de que la liquidación del pasado ejercicio presupuestarios se haya saldado con una desviación negativa de 1,7 millones de euros.

El portavoz de UPL, Pedro Ángel Gallego, califica la gestión económica municipal de «desastrosa» y vaticina «una década muy complicada con importantes subidas tributarias y baja calidad en los servicios municipales,».

El concejal y presidente de UPL considera que este año los problemas de liquidez han sido amortiguados gracias al préstamo a largo plazo para pagar las facturas a los proveedores, lo que permitió transformar tres millones de euros de deuda comercial a corto plazo en una deuda financiera a largo plazo, pero recuerda que los intereses tendrán que ser sufragados por todos los benaventanos.

En relación a la liquidación de 2011, Gallego precisa que haberla aprobado fuera de plazo ya conlleva la retención de los tributos del estado e incide en que su resultado final es fruto de «una deficiente gestión en materia económica realizada por el Equipo de Gobierno del PP, que siguió en 2011 con el despilfarro y descontrol en el gasto de años anteriores». El «estado alarmante» de las arcas municipales a finales del 2011, afirma, provocó la necesidad de aprobar en este año un Plan de Ajuste para acceder al préstamo para pago de facturas a proveedores.

Tras recordar que el resultado del remanente de tesorería «pone de manifiesto que la situación económica-financiera del Consistorio es mala al no haber recursos para financiar gastos» señala también que con esta liquidación Benavente incumplió en 2011 el objetivo de estabilidad presupuestaria en casi un 12%.