La Torre del Valle ha apostado fuerte por la supresión de barreras arquitectónicas en los edificios municipales. La actuación, iniciada hace unos años de la mano de la alcaldesa, Alicia Nefzi, ha supuesto un referente en los municipios no sólo de la comarca sino de la provincia. A todos los inmuebles de titularidad municipal, el Ayuntamiento ha procedido a la eliminación de barreras arquitectónicas. Tanto la Casa Consistorial de reciente construcción como el conjunto de tres inmuebles adosados, como son las antiguas escuelas convertidas en biblioteca, el viejo teleclub que ha pasado a ser un local de usos múltiples y, por último, el edificio de la antigua Casa Consistorial en el que su reciente rehabilitación gracias a la financiación del Fondo de Cooperación local por más de 50.000 euros ha permitido un destino social y cultural para uso y disfrute de los vecinos.
En todos los casos, las intervenciones de reforma han permitido suprimir las barreras arquitectónicas dejando accesos para todos los vecinos, sin menoscabo de sus condiciones o aptitudes físicas. Esta es la premisa que marcó Alicia Nefzi, quien ha optado por retirarse de la política y actualmente desempeña el cargo en funciones hasta el próximo día 11 de junio en que se constituye la nueva Corporación. Todas las personas tienen acceso a los edificios municipales, independientemente de lo que obliga la Ley pero que a duras penas vienen cumpliendo los Ayuntamientos, incluso en la ejecución de obra nueva, como ya ha puesto de manifiesto este diario.
La Torre del Valle quiso ayer fijar una puesta de largo a la eliminación total de barreras abriendo las puertas a los vecinos los inmuebles rehabilitados. A través de una exposición de artesanos locales y de la zona, algunos de ellos discapacitados, se hace hincapié en la necesidad de suprimir en su totalidad las barreras arquitectónicas al igual que «todo tipo de barreras que frenan la comunicación interpersonal», al decir de Nefzi. Artesanos aficionados, con renombre o anónimos, algunos de ellos discapacitados, se han querido sumar a la iniciativa emprendida por Alicia Nefzi quien desde su silla de ruedas se reniega a vislumbrar el panorama con otro prisma.
Esculturas en hierro del reconocido artesano de Burganes de Valverde, «Nano», se mezclan con las tallas y piezas de madera del vecino de Quiruelas, Felipe Blanco. En la muestra expositiva abierta ayer en La Torre del Valle participa también otro vecino de Quiruelas, Rafael Cidón, con una serie de elaborados mantones. Dos vecinos discapacitados de Torres del Carrizal, María Ángeles y Alberto, participan en la muestra con trabajos en cuero y piezas de cristal. Los vecinos de La Torre, Esther Ramos, Horacio Guerra y el joven Oscar Maniega muestran trabajos realizados con mezclas de materiales el primero de ellos; una maqueta de madera de la iglesia del pueblo y miniaturas de aperos agrícolas, el segundo; así como trabajos en cuero como caperuzas para cetrería realizados por Maniega.
El Ayuntamiento ha destinado la rehabilitada planta superior del antiguo Consistorio a la Junta Agropecuaria Local donde se ha permitido una recreación permanente de una antigua escuela dotada con los pupitres y materiales de la época, todos ellos inscritos en el inventario de bienes municipales. Al edificio se accede por una escalera, pero en breve, advierte la alcaldesa en funciones, se instalará una plataforma elevadora para discapacitados.
Los vecinos de La Torre degustaron al mediodía de ayer un vino español ofrecido por el Ayuntamiento con ocasión de la apertura de puertas de la muestra expositiva en los locales ya rehabilitados. Los asistentes alabaron las obras expuestas.
