La Concejalía de Hacienda y el Servicio Municipal de Intervención están pendientes de que el Gobierno haga públicas las condiciones en que los ayuntamientos con una carga financiera inferior al 75% de los ingresos podrán contraer más deuda en los presupuestos municipales de 2011.

Las cuentas municipales de Benavente «están saneadas», recordaron ayer fuentes del equipo de Gobierno, que insistieron en precisar que solo se suscribirán nuevos créditos en el caso de que los requisitos que establezca el Ejecutivo sean asumibles.

Los detalles de esta rectificación del Gobierno son desconocidos aún en la letra pequeña, aunque sí se conoce que no se podrá destinar deuda a gasto corriente, sino a inversiones. Los créditos suscritos por el Ayuntamiento en los últimos años se han destinado siempre al capítulo 6 de los presupuestos y se volvería a hacer en el caso de utilizarse está opción ahora: «bien para la aportación de subvenciones para inversiones promovidas por otras administraciones o para inversiones directas del Ayuntamiento», indicaron las mismas fuentes.

La carga financiera de las arcas municipales benaventanas es del 62% de los ingresos corrientes. El techo legal es del 130%. Benavente está a un 13% del 75% máximo de endeudamiento para la que el ejecutivo está dispuesto a permitir la concertación de nuevos créditos, y a un 68% de diferencia de sus posibilidades máximas de endeudamiento.

La noticia de que el Gobierno no permitiría a las administraciones locales contraer más deuda cayó como un jarro de agua fría hace apenas unos meses en la Concejalía de Hacienda. Su titular, José Antonio de Dios, no ha dejado de recordar en este tiempo que el Ayuntamiento de Benavente ha cumplido la Ley de Estabilidad Presupuestaria concertando nueva deuda por el importe de la amortización anual, sumándose así a las numerosas voces de ediles y alcaldes del territorio nacional que consideraban injusta la medida para las administraciones saneadas. La prohibición llegó en un momento duro. Los ingresos municipales han caído bajo mínimos en el último año y de hecho el Ayuntamiento comienza el curso político con la orden de reducir los gastos corrientes en cada una de las concejalías un 20%.