Un equipo del programa televisivo «Cuarto Milenio» pasó una noche a mediados de esta semana en el camping de Santa Cristina de la Polvorosa para intentar verificar la existencia de «ruidos y sonidos de niños jugando» durante la madrugada, «sucesos paranormales» que relacionan con la tragedia ocurrida en 1979, cuando 45 alumnos y cuatro profesores del colegio Vista Alegre de Vigo perdieron la vida tras caer al río Órbigo el autobús en el que viajaban.

Los miembros del equipo habrían tomado fotografías e imágenes con el propósito de comprobar la existencia de estos presuntos «sucesos paranormales», según informaron distintas fuentes. Su presencia en Santa Cristina y el objeto de su visita no pasaron inadvertidos. Ellos mismos relataron en varios bares de la localidad lo que intentaban investigar. El supuesto trabajo se desarrolló entre el martes y el jueves.

«Uno de ellos es conocido porque sale habitualmente en el programa. Hace reportajes en los cementerios y cosas así. Yo lo he visto en varias ocasiones. Me contó que estaban intentando grabar sonidos de niños jugando en el camping durante la madrugada», explica Mario, camarero de un bar del paseo de la Estacada, a escasos metros del camping. Según las explicaciones de los miembros del equipo, los sonidos nocturnos que intentaban captar tendían que ver con los niños de 12 y 14 años que habían perecido en el accidente.

La noticia de que el programa que dirige Íker Jiménez en Cuatro tenía un equipo en Santa Cristina se propagó rápidamente y ha sido motivo de muchos comentarios en los últimos días en la localidad ribereña. La tragedia ocurrida en abril de 1979 constituye un duro recuerdo en Santa Cristina, que se volcó en el rescate de la decena de supervivientes y en la tarea de recuperar las víctimas del río. La mayoría de los vecinos consultados por este periódico restó credibilidad al objeto de esta investigación de sucesos paranormales. Nadie en los años que lleva abierto el camping y con anterioridad a su existencia escuchó o tuvo conocimiento de nada similar a sonidos o ruidos como los investigados, afirmaron las personas consultadas.

Las instalaciones de La Estacada cerraron sus puertas al público durante la noche del día 31. La vigilante contratada para hacer el turno nocturno ya no acudió a trabajar ese día, explicó el alcalde, Pablo Rubio. Este periódico intentó ayer confirmar con Cuarto Milenio las informaciones vecinales. Dado que no es posible el contacto telefónico la comunicación se realizó a través de correo electrónico. Al cierre de esta edición no había respuesta.

El camping de la Estacada ocupa una amplia zona verde a unos cuantos metros de la orilla del río Órbigo. Su perímetro está vallado y cubierto de vegetación y en su zona mas septentrional hace esquina frente al puente, donde desde hace un año, en la Plaza de Vigo, se alza el monolito que la ciudad regaló a Santa Cristina de la Polvorosa en señal de agradecimiento tres meses después del siniestro.