Los desprendimientos de piedras y tierra sobre la carretera del Eria en el talud del término de Arrabalde hacen muy peligrosa la circulación de vehículos en esta vía. Los desprendimientos se han incrementado en los últimos días como ha podido constatar este diario.

A finales del pasado año, tanto la Diputación Provincial, titular de la carretera ZA-P-1511 de Fuente Encalada a Benavente, como agentes de la Guardia Civil, procedieron a acordonar la zona ante los desprendimientos de piedras sobre la calzada, algunas de ellas con más de media tonelada de peso y que ahora mismo ocupan las cunetas. Si entonces se hacía evidente el peligro para la circulación rodada, el paso de los días con las últimas lluvias ha venido a incrementar la inseguridad del tráfico.

Los últimos desprendimientos han provocado una gran fisura sobre el talud con riesgo de agravar aún más la situación.

Los efectos del deshielo, las rachas de viento y las últimas lluvias han provocado secuelas en esta carretera del Eria, sobre todo en los taludes existentes en el término de Arrabalde y los que se encuentran entre los términos de Morales de Rey y Manganeses. Hay problemas en el punto kilométrico 22,200 en Arrabalde y también en el t ramo de los taludes existentes entre los términos de Manganeses y Morales, donde la calzada ha sido invadida por numerosas piedras.

La institución provincial procedió a señalizar la vía advirtiendo del peligro de desprendimientos hace ahora cinco años. Hace cuatro instaló una red metálica de protección sobre una pequeña parte de una de las paredes del talud de Manganeses en las inmediaciones del acceso a la autovía A-52.