El ex gerente del Centro Benaventano de Transportes, Natalio José Camacho Casado, no llegaba a final de mes con su sueldo de 70.000 euros anuales. Tampoco contribuyeron a mejorar su situación los 36.600 euros en dietas del PLB que se embolsó entre los años 2005-2007. Emulando las «políticas de remuneración» de otras Centros de Transportes donde los gerentes «cobraban más» y donde «se daban anticipos de hasta dos años», Camacho decidió seguir esa misma senda de disponibilidad del dinero de la sociedad «bajo mi responsabilidad» y «sin decir nada a nadie», según declaró judicialmente.

Durante ocho años, entre 2002 y 2009, dispuso de 366.000 euros, 61 millones de pesetas. Esta es al parecer la cantidad finalmente desfalcada a la sociedad del CTB.

La auditoría externa encargada por el consejo de administración ha sumado 6.500 euros más a la deuda. Una empresa le entregó en mano a Camacho esta cantidad tras firmar un recibo. El ex gerente la utilizó una vez más como estipendio personal.

El Juzgado de Instrucción número 2 de Benavente levantó el secreto de sumario hace algunas semanas según se ha sabido ahora, y de esta forma se han podido conocer someramente las razones del desfalco. Durante el interrogatorio, plasmado en unas diez páginas, Camacho comienza justificando las diferencias de remuneración con otros gerentes y otros Centros de Transportes; para reconocer más tarde sus «problemas con el juego» y terminar confesando cogió todo ese dinero del que en esos días se estaba hablando en la prensa.

El alcalde y presidente de la sociedad del CTB, Saturnino Mañanes, informó el miércoles por la noche en una sesión informativa al resto de los consejeros del resultado de la auditoría y del levantamiento del secreto del sumario. En las dos próximas semanas, el CTB convocará una reunión del consejo de administración.