La consejera de Agricultura y Ganadería y portavoz de la Junta, Milagros Marcos, pidió ayer tranquilidad a los ganaderos y aseguró que trabajan en el desarrollo del nuevo decreto para que en el "menor tiempo posible" se pueda cazar al norte del Duero, ya que consideró que no se pueden poner "trabas" y que la conservación de la especie es compatible con la actividad económica en el mundo rural.

Marcos trasladó esa valoración después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) haya paralizado de forma cautelar la caza del lobo durante esta temporada 2018-2019, en un auto que responde al recurso contencioso-administrativo interpuesto por la Asociación para el Cuidado y el Estudio del Lobo Ibérico (Ascel), presentado en junio de 2017.

Marcos incidió en que se garantizará la sostenibilidad de la especie y resaltó que para ello se deben adoptar medidas contra la superpoblación, pero también defendió la actividad ganadera y económica en el medio rural más allá de "la contemplación". "Si se habla de población no se puede en paralelo poner trabas a toda la actividad que genera desarrollo económico y permite vivir en el medio rural", argumentó.