El cambio de modelo productivo en el campo, con explotaciones más grandes y menor número de profesionales, es uno de los aspectos que ha generado una nueva tendencia en el régimen de afiliación a la Seguridad Social en el sector agrícola y ganadero, que lejos de lo habitual hace no tantos años, cuando el autónomo era el régimen mayoritario, ha experimentado un giro en la Comunidad. El número de autónomos se ha reducido en un total de 1.610 desde el año 2013 frente a los 2.597 que han pasado a trabajar por cuenta ajena, un giro que deja un balance de casi un millar de trabajadores más en el ámbito agrario desde diciembre de 2013.

Según los datos de evolución del número de afiliados a la Seguridad Social en el sector agrario publicados por la Consejería de Agricultura y Ganadería, el año pasado concluyó con un total de 59.679 trabajadores afiliados en el sector en la Comunidad. De ellos 40.331 pertenecen al régimen de trabajadores autónomos -30.538 del Sistema Especial de Trabajadores Agrarios (SETA) y 9.793 del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA)- y 19.348 del régimen general. Desde las organizaciones profesionales agrarias, se reconoce que es la "realidad" que existe en Castilla y León, con un número menor de autónomos y explotaciones más grandes.