El proyecto de ley anunciado por el Gobierno basado en la aplicación de un impuesto sobre bebidas azucaradas ha conseguido unir al sector que ayer plasmó en un manifiesto su rechazo unánime a esta propuesta. El citado manifiesto ha sido rubricado por la consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta, las organizaciones profesionales agrarias, las cooperativas agroalimentarias, la industria azucarera y la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León, documento en el que los firmantes muestran su rechazo a la propuesta y solicitan que sea retirada.

El manifiesto firmado ayer especifica que si este nuevo impuesto propuesto por el Gobierno es considerado una medida recaudatoria y fiscal, sería necesario realizar un estudio del impacto económico colateral que producirá en el sector remolachero-azucarero y en el empleo, "a efectos de que la recaudación revierta en el sector perjudicado y compense las pérdidas". El citado manifiesto será trasladado por la Junta de Castilla y León al Gobierno.