La Consejería de Agricultura y Ganadería pone en marcha la Plataforma de Competitividad Productiva del sector ovino y caprino con el objetivo de poner en marcha 36 medidas dirigidas al ganadero, a la transformación y a la distribución, con el objetivo de conseguir un reparto equitativo de beneficios en toda la cadena de valor, de tal manera que todos los agentes vean la necesidad de colaborar entre ellos. La plataforma nace con 4 retos: rejuvenecer el sector, mejorar la fortaleza y el posicionamiento de los productores, conseguir una mayor competitividad e impulsar la comercialización. Para ello, esta nueva entidad contará con un presupuesto de 60 millones de euros.

Para el sector ganadero se han diseñado medidas como el apoyo a la incorporación de jóvenes ganaderos y a la modernización de las explotaciones, el fortalecimiento del asociacionismo, un instrumento que indemnice a los ganaderos por una severa caída en sus ingresos, apoyo a la mejora genética y a la mejora del nivel sanitario de las explotaciones ganaderas y se elaborarán planes de eficiencia energética que irán acompañados de líneas de préstamos ventajosas.

Además, para conseguir que haya transparencia en la cadena de valor, se ofrecerá formación sobre las diferentes modalidades de contratos y de negociación aplicables al sector, y se creará una red regional de explotaciones de ovino y caprino así como un Observatorio de Precios. Los ganaderos contarán también con medidas de apoyo a la regulación de la producción con el objetivo de que comercialicen sus productos a lo largo de todo el año.

En cuanto al sector transformador, la plataforma facilitará a las asociaciones el acceso a las infraestructuras que permitan regular la oferta de la leche y carne de ovino y caprino, establece un plan de apoyo a la calidad de los productos lácteos y cárnicos con programas específicos de búsqueda de nuevas presentaciones y de nuevos canales de comercialización, especialmente la exportación. En este sentido, se apoyará a aquellas empresas que precisen requisitos especiales para exportar productos como Halal, Kosher o IFS, con el objetivo de entrar en nuevos mercados con grandes posibilidades.

A cambio, la industria de transformación se compromete a aplicar en sus contratos precios y volúmenes de compra que, en concordancia con la evolución del mercado, contribuyan a la sostenibilidad de las explotaciones de ovino y caprino.

Los distribuidores han acordado también contribuir al mantenimiento del sector lácteo favoreciendo que se establezca un precio para sus productos que no cuestione la remuneración del trabajo de transformadores y productores. Además, se contribuirá a diferenciar los productos, su composición y su origen.

Por último, se fomentará mediante medidas promocionales el consumo de productos lácteos de origen ovino y caprino, así como de carne de lechazo y cabrito, y se potenciará especialmente los lechazos y cabritos de Castilla y León amparados por figuras de calidad y bajo el paraguas de Tierra de Sabor.