La ministra en funciones de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, mostró ayer calma ante las negociaciones del acuerdo comercial con EEUU (el TTIP), mientras que las reacciones en el sector agroalimentario han oscilado entre la cautela y la preocupación.

La filtración de documentos -publicados por Greenpeace-, sobre las conversaciones del Tratado Transatlántico de Libre Comercio (TTIP, siglas) entre la UE y EEUU ha generado numerosas reacciones desde el ámbito agroalimentario.

García Tejerina ha asegurado que "no hay ningún riesgo" de que la UE "vaya a sacrificar todo lo que se ha conseguido" en materia de calidad alimentaria, porque la Comisión Europea (CE) es "muy consciente" de que tiene un mandato de los Gobiernos comunitarios que incluye "garantizar el modelo europeo" y sus estándares.

Para la ministra, el TTIP tiene una "enorme importancia" para el sector agroalimentario y el conjunto de la economía española, pues tendrá como efecto un crecimiento a raíz de las relaciones comerciales; por ello, muchos subsectores están esperando "una mejora" y una mayor apertura entre ambos bloques.

El responsable de relaciones internacionales de Cooperativas Agroalimentarias, Gabriel Trenzado, ha declarado que "no es nuevo" que EEUU esté presionando, si bien lo que "preocupa" es que la CE "mantenga el mandato (autorización)" que tiene.

Según Trenzado, si la CE "se salta" ese mandato y el TTIP es "desequilibrado" no saldrá adelante porque "no lo ratificarán" las otras instituciones comunitarias (Consejo de Ministros o Parlamento Europeo); ha añadido que nada es definitivo hasta que los dos bloques pacten el acuerdo final, lo que a su juicio no ocurrirá este año.