Las intensas lluvias y las avalanchas de agua provocadas por los desembalses de los pantanos del Duero ha provocado pérdidas en miles de hectáreas agrícolas en Castilla y León, según ha denunciado hoy en un comunicado ASAJA, que todavía no puede ofrecer el impacto económico que tendrá en los agricultores.

Desde la asociación se apunta también a la falta de limpieza de los cauces como un aliciente más que acentúa las inundaciones que posteriormente ocasionan importantes daños patrimoniales a los agricultores.

Los daños son visibles a lo largo de buena parte de la cuenca, principalmente en el ramal norte, llegando mucho más allá de las áreas cercanas a los ríos principales, ya que los desbordamientos se han extendido por riachuelos y regatos que habitualmente apenas llevan agua.

Según el comunicado, las pérdidas hubieran sido "al menos en buena parte evitables si desde la Confederación Hidrográfica del Duero cumplieran con su obligación de limpiar y adecuar los cauces", además de que los momentos que se eligen para abrir los aliviaderos de los pantanos "a veces agravan más que alivian el problema".

Desde ASAJA se calculan daños tanto en fincas de cereal crecido, en las que las plantas se pueden echar a perder por el exceso de humedad, como en las fincas recientemente sembradas, en las que con toda seguridad habrá que volver a esembrar.