Que la PAC resulte fácil de tramitar y que el profesional del campo disponga de un asesoramiento integral en todo lo relativo a la gestión de estas ayudas y que incluso pueda cobrarlas por anticipado si lo desea son algunos de los logros que han afianzado a Caja Rural de Zamora como la principal cooperativa de crédito en tramitación de ayudas PAC. De hecho, la entidad zamorana tramita actualmente cerca del 46 por ciento de los expedientes de la Política Agraria Común de la provincia, según los datos recopilados por la propia entidad, que cada campaña gestiona cerca de seis mil solicitudes. A ello contribuye el hecho de que Caja Rural ofrezca facilidades en la tramitación, recoja solicitudes en todas sus oficinas, un total de 64 en la provincia, y ofrezca en todo momento un asesoramiento integral a sus clientes en lo relativo a las subvenciones de la PAC y su tramitación.

Una de las cuestiones que más preocupa en las últimas campañas a los profesionales del campo beneficiarios de las ayudas es la relativa al cuaderno de explotación del que deben disponer de las tres últimas campañas en caso de que la Administración realice una inspección de su solicitud. Al respecto, fiel a la filosofía de dar el máximo apoyo a sus clientes, Caja Rural de Zamora cuenta con los servicios del ingeniero agrónomo César Hernández que, de forma gratuita, ofrece ayuda y resuelve dudas sobre esa nueva obligación que tienen los titulares de las explotaciones agrícolas que se benefician de ayudas PAC.

El cuaderno de explotación al que obliga el Real Decreto 1.311 de 2012 debe cumplir una serie de condiciones y, según precisa esa normativa, obliga además a utilizar sólo los productos fitosanitarios autorizados ajustados al tipo de cultivo y otras variables como las dimensiones de la explotación o, por ejemplo, si cuenta con un pozo de agua para consumo humano. César Hernández indica que el Real Decreto obliga a llevar un registro de los productos fitosanitarios en un cuaderno de explotación obligatorio para todos los titulares de las mismas, en el que se especifiquen los datos de la finca y de las personas o empresas encargadas de aplicar los fitosanitarios. También hay que dejar constancia de los tratamientos y tener en cuenta que no se sobrepasen las dosis autorizadas y que hay productos que no están autorizados para determinados cultivos.

Los tratamientos deben estar supervisados por un técnico en explotaciones de más de cinco hectáreas de regadío o de viñedo, a partir de dos hectáreas en explotaciones hortícolas o de frutales y de media hectárea en invernaderos. Del mismo modo, es necesario informar de las semillas que están tratadas, si se tratan los productos después de cosechar o si se desinfectan los locales en los que se almacena la cosecha.

Guardar las facturas

Los análisis de tierra, de agua o de cultivo que se efectúen también deben reflejarse en el libro de explotación, en el que se anota además la fecha de comercialización y, en el caso de la zona de Villafáfila, también hay que llevar un registro de la fertilización de las parcelas. Explotaciones que reciben ayudas agroambientales o viñedos de Denominaciones de Origen tienen igualmente que cumplir requisitos específicos de anotación en ese cuaderno sobre cuya confección Caja Rural de Zamora da información y asesora a sus clientes. César Hernández recuerda que también es necesario guardar las facturas de compra de productos fitosanitarios y los justificantes de entrega de los envases vacíos, además de los contratos con la empresa que realiza los tratamientos cuando estos no los haga el titular de la explotación.

La información relativa a ese cuaderno de explotación es uno de los servicios añadidos que sin coste ofrece Caja Rural de Zamora a quienes tramitan la PAC a través de la entidad. Igualmente, la entidad cooperativa zamorana está en disposición de adelantar el dinero de las ayudas a quienes lo soliciten y ofrece igualmente créditos y financiación para inversiones en las explotaciones y otras necesidades, además de asesorar a través de su departamento de banca privada sobre cómo invertir los ahorros de forma rentable y segura, según explica el jefe del departamento Agrario de Caja Rural de Zamora, Feliciano Ferrero.

Compromiso continuo con el medio rural y el cooperativismo agroganadero

Como entidad de referencia en el mundo rural, del que nace y donde tiene una de sus vocaciones de ser, Caja Rural de Zamora muestra un compromiso continuo con el desarrollo y la economía de todos los núcleos de población de la provincia y de forma especial con quienes realizan su actividad en el campo. Tanto agricultores como ganaderos disponen de facilidades y apoyo en la que actualmente es la única entidad bancaria netamente zamorana. El apoyo que ofrece la cooperativa de crédito a toda la geografía provincial se refleja también en la estrecha relación que mantiene con el cooperativismo agrario y ganadero. Caja Rural de Zamora es también líder en ese sector, ya que cuenta actualmente con 215 cooperativas asociadas a las que ofrece ayuda en financiación para el desarrollo de proyectos que beneficien al sector agroganadero provincial.