"Hasta aquí hemos llegado; o reaccionan de una vez o vamos a pasar a la acción". Las palabras de Aurelio González, representante de la Alianza UPA-Coag, expresan el escepticismo con el que los líderes sindicales agrarios salieron de la reunión celebrada en Valladolid con el director general del Medio Natural de la Consejería de Medio Ambiente, José Ángel Arranz.

¿El contenido? De nuevo la fauna, los ataques de lobos, el pago de indemnizaciones, el cumplimiento de los cupos, la superpoblación de ciervos y jabalíes que tantos quebraderos de cabeza está generando a agricultores y ganaderos. Problemas ya viejos, tanto para el sector como para la Junta de Castilla y León.

La nota oficial de la Alianza insiste en lo ya pedido por activa y por pasiva, año tras año. Por un lado reclaman "máxima agilidad" en las indemnizaciones de los ataques que se produzcan al sur del Duero, "porque resulta un despropósito que los pagos a los afectados lleguen con más de dos años de retraso". También trasladaron la necesidad de que exista "un riguroso control poblacional" y que se cumplan al 100 % los cupos de caza. "No es concebible que en 5 años tan solo se haya cumplido un 50% de los permisos porque esto supone una cría desmesurada de ejemplares, lo que ha propiciado que actualmente, según nuestras estimaciones, haya más de 2.000 lobos en nuestra comunidad autónoma".

Otra propuesta pasa por poner en marcha una Mesa de Seguimiento del Lobo para analizar la expansión y control de la especie.

La Alianza pidió ayer también al director general "el traslado urgente de precintos de caza desde los servicios territoriales a los cotos, puesto que bien avanzado el mes de noviembre aún no se han repartido en muchos casos" y que para la caza en espera se incremente el horario hasta 24 horas.

Los representantes agrarios insistieron -en esto también- en alertar sobre la "situación límite" en la que se encuentran muchos agricultores con respecto a los daños de ciervos y jabalíes. Como solución piden que se den facilidades para autorizar cacerías, así como un calendario de formación e información a los cotos de caza sobre los mejores sistemas para eliminar el exceso de población de estas especies.

¿Y qué respondió el director general? Según Aurelio González "mostró una actitud receptiva, pero eso a nosotros ya no nos vale porque son muchas veces escuchando lo mismo y no vemos que se adopten medidas". Por eso esta vez la Alianza se da el plazo de un mes para valorar si la Junta ha actuado ante la batería de planteamientos. "Le hemos pedido que pasado el mes nos vuelva a convocar para ver si las medidas propuestas se han puesto en marcha y qué resultados se han obtenido, pues de lo contrario no descartamos emprender actos de protesta a nivel provincial y regional".

Las organizaciones agrarias son receptoras del malestar del sector con el problema de la fauna y en las asambleas se están reclamando medidas drásticas.