La marca de garantía del judión de La Granja espera poner en el mercado alrededor de 17.000 kilos en su primera campaña a partir de finales de 2015, cuya superficie de producción rondará finalmente las diez hectáreas repartidas por San Ildefonso, Caballar, Cabañas de Polendos y Hontanares, entre otros pueblos del área protegida. La demanda anual de tiendas y restaurantes se estima en 25.000 kilos, pero no habrá semillas suficientes con certificación para alcanzar semejante cantidad en la temporada de su lanzamiento, a pesar de que no faltan agricultores, más de medio centenar, dispuestos a sumarse al proyecto con terrenos dentro de la delimitación geográfica.

La nueva marca quedó registrada como tal el pasado 3 de enero. Medio año después la asociación gestora sembró un cuarto de hectárea en la parcela municipal del banco de semillas para generar superficie de producción con el reparto de simiente entre los agricultores que quieren participar y no tienen legumbre propia validada por el Consorcio Agropecuario Provincial. Y la primera campaña amparada por el nuevo sello de calidad será la citada de otoño de 2015, fecha a partir de la cual el establecimiento que ofrezca judión de La Granja sin certificar podrá ser sancionado por fraude.

El presidente de la Asociación Tutor de La Granja, Jesús Gómez Grande, admite en declaraciones que fueron “demasiado optimistas” al creer que este mismo año podrían obtener entre 850 y 1.000 kilos del banco de semillas para su posterior reparto. Con esa cantidad se habría podido alcanzar la meta de las 25 toneladas de demanda comercial: unas 15 derivadas de la simiente de esa parcela, más las 10 que se prevé que aporten una veintena de agricultores con judión propio de calidad certificada.

A ellos se suma otra veintena de productores con semilla propia y huertos pequeños, más bien domésticos, y otros tantos serán los que se abastezcan del banco, donde sólo quedó tiempo para sembrar ese cuarto de hectárea que dará para unos 430 kilos. “Más o menos es la mitad de lo esperado”, en cuanto a extensión de terreno cultivado y producción, debido sobre todo a que el proceso administrativo para la puesta en marcha de la asociación les llevó a plantar con un mes de retraso, según añade Gómez Grande a dos semanas de terminar la recogida.

De esos 430 kilos se reservarán 80 para sembrar allí de nuevo en mayo de 2015 y generar más semillas, mientras que los 350 restantes se repartirán entre los agricultores, quienes con ellos podrán obtener casi siete toneladas, ya que se estima un rendimiento de 1.700 kilos por hectárea y en total podrán cultivar cuatro. La asociación les convocará a una reunión a principios de año para explicarles los pasos a seguir para registrarse como productores de la marca, trámite que requerirá el pago de una cuota única (sin renovaciones) de 30 euros, aparte de siete euros por kilo de semilla para aquellos que las necesiten.

Dos cosechas de semillas

El banco de semillas deberá seguir funcionando por ello como tal durante el próximo año, porque “sólo así se podrá generar más simiente para garantizar la cobertura de todo el mercado ya no en 2015, sino a partir de 2016”, explica el presidente de la asociación gestora de una marca cuya titularidad ostenta el Consistorio. “Pero aunque la previsión inicial fuera efectivamente de 25.000 kilos, yo creo que la expectativa se cumplirá de sobra alcanzando esos 17.000 para empezar, porque además a partir de ahí el incremento será progresivo”, matiza el alcalde granjeño, José Luis Vázquez.

Lo que ya está “prácticamente cerrado” es el acuerdo de la asociación con la firma agroalimentaria La Criba de Valseca para que lleve a cabo el envasado desde la primera cosecha amparada por la marca de garantía, de modo que el judión compartirá instalaciones con el conocido garbanzo que lleva el nombre de esa localidad. Y el último paso será registrar los restaurantes y tiendas que quieran convertirse en operadores de la marca, si bien “no hay prisa para eso porque lo importante, antes que nada, es asegurar la producción”, subraya Gómez Grande.

Un volumen de producción, el de 17.000 kilos, que daría para abastecer 15 judiadas populares como las que este municipio celebra por San Luis, con la preparación de 1.100 kilos para unos 11.000 comensales. De abastecer tal fiesta, por cierto, se encargará precisamente la parcela del banco de semillas a partir de 2016.

Pendientes de ayudas públicas

La Consejería de Agricultura y Ganadería concedió una nueva subvención de 11.708,15 euros a la asociación el pasado mes de junio para ayudarle en sus primeros pasos, pero ese presupuesto se agotó el 31 de octubre, última fecha hábil de justificación del gasto, y hoy se vuelve a encontrar “sin fondos para seguir adelante”, lamenta su presidente. Pero “hay expectativas de conseguirlos de las instituciones implicadas”, apunta el alcalde granjeño, “convencido” de que la Junta y la Diputación seguirán colaborando con el Consistorio y de que la asociación podrá ser viable por sí sola desde 2016.

“Yo creo que en 2015 todavía será necesario un último impulso por parte de las tres administraciones”, considera el alcalde de San Ildefonso, y en el caso del Ayuntamiento “ya no es sólo una cuestión de intención porque está obligado como titular de la marca”. De hecho, en la actualidad costea algunos gastos de material e infraestructura, incluida la sede, ubicada en una oficina municipal.

En principio, la asociación cree que necesitará al menos mantener a los tres trabajadores que han estado los últimos meses para “controlar la gestión de la marca, asesorar al productor, seguir la trazabilidad del judión desde la tierra hasta la tienda o el restaurante y cultivar el banco de semillas”, repasa Gómez Grande. “Y a partir de 2016 el judión ya será un sector productivo de generación de riqueza con saldo positivo, y la gestión de la marca de garantía también”, vaticina Vázquez.